FERNANDO PÉREZ ROSANO

Nació en Facinas hace sesenta y cinco años. El menor de nueve hermanos, cinco hembras y cuatro varones, componentes de una de las familias más representativas de nuestro pueblo. Hijo de Fernando Pérez y María Rosano.

        Fueron los primeros propietarios de la principal fábrica de harina y panadería.

         Como el menor de un saga tan numerosa, recibió una educación más avanzada, aunque Fernando es de esas personas que sabe de todo, y no en sentido peyorativo, sino  fiel a la verdad. Presumo de ser uno de sus mejores amigos, y nunca dejó de sorprenderme.

Habilidad y arte para la pintura y el dibujo, dominio del inglés, virtuosismo para la música, especialmente la guitarra, aunque no se le resisten otros instrumentos, cazador de los que le dan a la pieza, jugador de billar que no hay quién le gane, últimamente de golf, con varios premios de aficionados…. y así podría estar un rato resaltando sus cualidades.

         De nada de esto es conciente él, lo hace todo con total normalidad, y por ello nunca le ví ufanarse, más bien su carácter es de naturalidad y humildad.

         Compartí con él muchos momentos cuando juntamos nuestras aficiones por la música. Canta y toca la guitarra como un profesional, sea en inglés, francés o español. Siempre alegre y ocurrente.

         Su vida laboral comenzó en la Base Naval de Rota y terminó en la banca, de la que se jubiló recientemente en la costa del sol.

         Añora su pueblo, Facinas, y muestra un interés constante por nuestras cosas, principalmente por recordar amistades, “personajes”, anécdotas, etc.

         Fernando es de esas personas que no vive cara a la galería, su condición es profunda, seria y responsable. Casado con Ana Mari, su complemento ideal, tienen dos retoños que son fieles depositarios de sus cualidades. Viven felices en San Pedro de Alcántara (Málaga), y quiera Dios que por muchos años.

         Doy fe de que merece ocupar un lugar en nuestro espacio de “Personajes”

                                      Sebastián Álvarez Cabeza